Los intentos de llegar a la Patagonia con cargas de carne con hueso de otras provincias se siguen reiterando y desde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) están muy atentos a las posibles irregularidades.

El responsable de la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica, Oscar Astibia, reconoció que hay procedimientos permanentes y que se está trabajando mucho con la detección de frutas y verduras “hospedantes de mosca de las frutas”.

 â€œSi bien es una tarea que el equipo de inspección cumple todos los días del año durante las 24 horas, advertimos que en lo que va de la temporada estival se han incrementado notablemente los intentos de ingreso de productos cárnicos y de origen vegetal de ingreso prohibido y/o restringido a nuestra zona”, subrayó Astibia.

A los constantes operativos de detección de ingreso ilegal de carne con hueso, en los últimos días se sumaron casos de ocultamientos de frutas hospedantes de mosca de las frutas, una plaga que la región logró erradicar con beneficios directos al sector productivo.

Astibia precisó que el problema no se circunscribe a personas que habitualmente buscan atravesar el límite de La Pampa con Río Negro con valiosos costillares y otros cortes de carne vacuna sino que también se suman muchos turistas, que desconocen las limitaciones en materia de introducción de frutas y verduras.

A esta situación, alertó Astibia, se debe añadir “el ingreso de alrededor de 20 mil personas que llegan a los valles productivos a realizar trabajo temporario, en su gran mayoría desde la provincia de Tucumán, trayendo frutas y hortalizas de alto riesgo por mosca de los frutos, incluso en cantidades que exceden el consumo particular”.

Suman perros detectores

Con el objetivo de mejorar los controles que se realizan, el Senasa incorporó a finales del año pasado tres nuevos binomios de la Brigada Canina, que pasaron a cumplir tareas en distintos puestos de control.

Cada binomio está conformado por un inspector que cumple la función de guía y un perro de las razas Beagle o Labrador entrenado para detectar productos de origen animal y vegetal con ingreso restringido o prohibido a la región patagónica, por ser posibles portadores de plagas y/o enfermedades perjudiciales para la producción.

El último operativo positivo con canes se concretó en el puesto de Puente Dique, en Catriel.