El director de la Licenciatura en Ciencias del Ambiente y presidente del Instituto de Hidrógeno Verde de la UNRN, Patricio Solimano, señaló que “el petróleo es la energía actual, la mayoría de la torta de la energía actual es el petróleo o los hidrocarburos; se piensa al gas como una energía de transición porque produce menos dióxido de carbono, gases de efecto invernadero, que el petróleo, pero el hidrógeno se la piensa como la final a 30 años”. Dijo que “empresas petroleras que no se piensen como energéticas, que no vean  hacia el futuro el hidrógeno, están destinadas a desaparecer”.
Mencionó que así como en los ’50 el entonces presidente Juan Domingo Perón vio que la energía que se venía era la nuclear, que dejó “ la capacidad de producir reactores, capacidades técnico-científicas para trabajar”, ahora “estamos en ese momento con la cuestión el hidrógeno, el planteo es si nos subimos al tren o nos quedamos abajo”. Afirmó que si nos quedamos al margen “todo el conocimiento, todas las capacidades, van a ir a otros países”.
El profesional y académico expuso el pasado viernes en el 2º Congreso de la CGT regional del sur de la provincia de Buenos Aires y Zona Atlántica de Río Negro, que se realizó en forma virtual, donde se abordaron distintas temáticas vinculadas a “Educación, Trabajo y Economías Alternativas”.
Participaron en la oportunidad referentes gremiales de la CGT de Bahía Blanca, Viedma y Patagones, así como del campo institucional y político, como la exministra de Educación y actual legisladora, Mónica Silva; Oscar Cuartango, exministro de Trabajo Provincia de Buenos Aires;  Carlos Selva, diputado nacional Frente de Todos (FdT), entre otras y otros; la concejala del PAR Viedma, Vanessa Cacho Devincenzi, y, entre otros, Martin Quevedo: secretario de Medio Ambiente de la provincia de Buenos Aires.
Solimano señaló que “la energía se piensa a 20, 30 o 50 años” y en este marco están planteados tanto Vaca Muerta como el hidrógeno verde.
LA ENERGÍA DEL FUTURO
“El hidrógeno verde es una nueva forma de energía, es lo que se concibe teóricamente como la energía del futuro; el hidrógeno en sí es un elemento o químico de los más comunes que hay en el universo y lo que tiene de bueno es que hace combustión muy rápidamente, por eso nunca está solo, siempre está en agua”, explicitó.
Expresó que “el petróleo es la energía actual, la mayoría de la torta de la energía actual es el petróleo o los hidrocarburos; se piensa al gas como una energía de transición porque produce menos dióxido de carbono, gases de efecto invernadero, que el petróleo, pero el hidrógeno se la piensa como la final a 30 años”.
Dijo que “empresas petroleras que no se piensen como energéticas, que no vean  hacia el futuro el hidrógeno, están destinadas a desaparecer, es decir, a 30 años el petróleo va a dejar de tener la relevancia que tiene hoy”.
Indicó que en el país y en la provincia hay que pensar el desarrollo con estos lapsos de tiempo, con ese límite temporal de 30 años, y con el hidrógeno “estamos en la semilla del proceso, es un momento histórico a nivel tecnológico  de cambio para el trabajo y el territorio”.
CINCO MIL AEROGENERADORES EN LA PATAGONIA
“Todo el proceso de hidrógeno necesita una fuente de electricidad y para que será verde debe ser de origen renovable, entonces lo que se está planteando la construcción de más o menos 5 mil aerogeneradores en la Patagonia, donde hay viento de sobra; esto es muchísimo, mucho más de lo que tenemos hoy por hoy en Argentina, con lo cual se requiere una gran capacitación de los trabajadores a nivel electromecánimo y metalmecánico, y una cantidad de cemento increíble”, explicitó.
Comparó este momento de decisión con “la que tomó el general Juan Domingo Perón de ir a la energía atómica y crear la CNEA, pensar la energía atómica como una energía a futuro y destacar las capacidades que nos dejó, la capacidad de producir reactores, capacidades técnico-científicas para trabajar; Perón fue una persona que planteó un plan estratégico energético, dijo que esto va por acá, ésta es la energía que se viene además de otras tecnologías”. “Ahora estamos en ese momento con la cuestión el hidrógeno, el planteo es si nos subimos al tren o nos quedamos abajo, hay que tener herramientas para tomar esa decisión, el estado las tiene, la CNEA, el Instituto Balseiro, el CONICET, las universidades, etc., hay que tomar esa decisión y si nos quedamos al margen todo el conocimiento, todas las capacidades, van a ir a otros países”, aseveró.
SI NADA CAMBIA LA SITUACIÓN AMBIENTAL SERÁ CATÁSTRÓFICA
Reflexionó que este camino del hidrógeno verde tiene como objetivo “descarbonizar, sacar el carbono de la atmósfera, que el cambio climático frene; acá me voy a poner ambiental (Solimano está especializado en Ciencias del Ambiente) y cuando hablo de estas cosas no soy un pájaro de buenos augurios, soy bastante oscuro cuando hablo de lo que se viene, por eso el descarbonizar es relevante”.
Agregó que  de acuerdos a los modelos matemáticos que evalúan desde los ‘80 el cambio climático, con organismos que se dedican a esto de manera seria y con base científica en Boston, Roma, Latinoamérica, etc. se está diciendo que para el 2040 o el 2050, de seguir igual, “se destruye el mundo ambientalmente”. “Desde el 80 hasta hoy lo que dicen se cumplió, entonces ¿por qué no pensar que lo que dicen para el 2040 o 2050 no va a pasar?; si todo sigue igual la polución será terrible, aunque si cambiamos, todo se acomodaría bastante rápido”, indicó.
Informó que la publicación de cambio climático de la ONU del 2021 dice que “estamos mal, la temperatura subió 1,5 grados  más o menos desde 1950 por los gases de efecto invernadero; esto trae contaminación, mayores problemas  de deshielos, inundaciones, los extremos son más extremos, el calor más caluroso y el frío más frío, de seguir así los incendios y las inundaciones van a ser más grandes”. “En el corto plazo, de no cambiar, el 1,5 grados aumentará a 2 grados de temperatura, y en la Argentina esto significará stress hídrico en el norte, aumento del nivel del mar en las costas y crisis hídrica en la cuenca del río Negro y en otras, cosas que estamos viendo bastante seguido”, mencionó.
Recordó en este marco el Mensaje Ambiental a los Pueblos y Ciudadanos del Mundo que en 1972 hizo Juan Domingo Perón, anticipándose a los que cada vez más tuvo actualidad: “Creemos que ya ha llegado la hora de que en todos los pueblos y gobiernos del mundo cobre conciencia la marcha suicida que la humanidad ha emprendido a través de la contaminación del medio ambiente y la biósfera, la dilapidación de los recursos naturales, el crecimiento sin freno de la población y la sobreestimación de la tecnología, de allí la necesidad de revertir esta marcha a través de la acción mancomunada internacional”. Agregó Perón además que “la concientización debe originarse en los hombres de ciencia, pero sólo puede transformarse en acción a través de los dirigentes políticos”.
Solimano concluyó que “el hidrógeno verde es una energía fácil y es uno de los caminos a tomar, pero necesitamos técnicos ampliamente capacitados”, de allí la importancia del Instituto de Hidrógeno Verde, la puesta en marcha de la Diplomatura, y los avances en formación y capacitación que en este sentido deben ponerse en marcha
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